Las personas normales se ríen.

A punto de empezar a comer, enciendo la televisión y empiezo a ver Los Simpsons, capítulo a medias pero no importa, ya lo vi unas doce veces.

Comienza el informativo, el pan de cada día: crisis, frío, lotería, muerte, gasto... lo de siempre vamos.
Voy para mi habitación a ver si la "eh mula" del tío Paco y el torrente 3: misión SGAE siguen funcionando a toda máquina y vuelvo al comedor a seguir viendo penas, lamentablemente me encuentro que se separan los Rebelde (esos de: Y soy rebelde, turitutirutirutiiii).













Wapohhhh

Oh, la mayor tragedia desde lo de Freddy Mercury. ¡Lo que ocurre ahora en Grecia es un absurdo comparado con esto por favor!.

Entrevistan a las fans, claro, os podéis imaginar como son las fans, pasó con Take That, pasó con los Backsteet Boys y pasa con estos perroflauta.

Algunos testimonios han sido:

- "Me pasé semanas llorando cuando me enteré"

- "Es que... son mi vida, mi vida, no me lo puedo creer"

Pero que (y respetando la igualdad ortográfica) imbécilas. Lo malo no es ahora cuando piensan con el - censored-, lo malo es cuando se vean unos cuantos años después gracias a que un amigo cabroncete grabara el informativo.
En ese momento, cuando se admiren en su propia estupidez diciendo que lloraron durante semanas porque se separaron un grupo de actorzuelos que grabaron un disco para sacar dinero de tontusas, se van a reir poco las nenas.

Aunque, por otra parte, a estos la tontería les ha durado cuatro años según se comentaba en el reportaje, tan mal no lo han hecho los mamones, además, la del pelo rojo está cañón.

Dejando aparte eso, la mejor declaración ha sido de la última chica entrevistada que decía algo como:

- "Para mí ha sido algo muy fuerte, las personas normales se ríen, pero a nosotras nos afecta"

¡Ahí le has dado!, por fin una adolescente que reconoce que la situación psíquica de su colectivo no es normal.

Pequeña locuela, eres una revolución entre fans, un punto de inflexión entre las imbécilas, te mereces otro episodio más de la serie en el que el Miguel Rodolfo José y el Justin Eric (cualquier parecido con los nombres de alguno de esos es pura coincidencia) se quiten la camiseta.












Tres puntos colega.